sábado, 29 de julio de 2017

XVII DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO CICLO A 2017

Posted by salvador on 7/29/2017 08:03:00 p.m. with No comments


¡EL VALOR DE LA ALEGRÍA!

El tema central de la predicación de Jesús es el Reino de Dios, y Jesús utiliza varias parábolas para describir la nueva realidad que ha inaugurado y empezado, con su presencia en este mundo, es decir es el Reino de Dios y su soberanía, con la sabiduría de Dios podrás descubrir ese tesoro o perla preciosa, que todo queda palidecido ante el asombro de su reino.

La alegría, es el determinante, que hace tomar la decisión, de venderlo todo,  por comprar el campo, donde encontró el tesoro y lo escondió; es decir, como nos dice San Pablo: “Para mí la mayor ganancia es Cristo”, y todo lo demás lo considera perdido; ahora, para adquirir el tesoro,  tiene que vender todo y despojarse de todo los valores que el mundo le ofrece, como son: dinero, poder, placer, los lujos, el consumismo, la fama, la fortuna, el prestigio, el éxito, etc. pues todo ello ya no cuenta, solo Cristo Jesús, que es el tesoro escondido; que para obtenerlo hay que renunciar a todo, y el operario, no quiso robar ese tesoro, sino que prefirió comprar el terreno y así poder contar con ese tesoro escondido de manera honesta.

Nuevamente la alegría es el determinante para tomar la decisión, por el Reino de Dios, el comerciante que busca perlas finas,  que al encontrar una de gran valor, vende todo, por adquirir esa perla preciosa de gran valor, que es Jesucristo; son como aquellos negociantes que conocen bien los productos que le dan mayor ganancias y eso es lo que más compran, para tener un negocio altamente rentable, porque conoce bien el mundo de los negocios; ahora cuanto más el negocio espiritual, que al conocer a Jesucristo, deja todo, o lo vende todo por comprar la perla preciosa, que es optar por su Reino, que tiene más valor que todos los reinos del mundo y nada lo puede superar.

Finalmente, el Reino de Dios, es como una red que se echa al mar, donde se cogen toda clase de peces, sean buenos o malos; ello nos invita a saber convivir con todos, sean buenos o malos, pero que no nos dejemos llevar por la maldad de ellos, porque llegará, el día del juicio, donde Dios ordenara separar a los buenos de los malos, por eso debe estar en una comunidad que donde se vivan los valores del Reino de Dios.  Lo peor que le puede pasar a un católico, como nos dice san Juan Crisóstomo, es que un católico se condene, teniendo todos los medios para salvarse, no logra salvarse, y como nos dice San Agustín, cayó en la mayor desgracia eternamente.                           

                    Pbro. Salvador A. Carrasco Castro

sábado, 22 de julio de 2017

XVI DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO CICLO A

Posted by salvador on 7/22/2017 10:33:00 p.m. with No comments

¡EL BIEN PREVALECE!

El Buen sembrador es Dios, sabemos que Dios ha creado todo de la nada y todo lo que hizo, era bueno; Dios no ha creado el mal, incluso el hombre fue creado por Dios por puro amor y para el amor, por tanto, el hombre tiene que estar vigilante, para no ser engañado por el demonio, pues de lo contrario habrá dos sembradores y dos sementeras.

La realidad del mal viene del Demonio, que siembra cizaña en el corazón del hombre que está dormido, que ha asumido su vida de cristiano de manera irresponsable, convirtiéndose en sementera del mal, ya que no ha sido vigilante, para evitar que en el corazón se siembre la maldad. Para evitar que el Demonio, siembre cizaña en nuestro corazón, es necesario la oración frecuente, la frecuencia en la Confesión y recibir la sagrada comunión, meditar la palabra de Dios, realizar obras de caridad…

Dios da una oportunidad al pecador, no quiere que arranquen la cizaña, Dios es paciente con el pecador; por eso el sembrador, les dice que no arranquen la cizaña, no vaya a ser que cuando arranquen la cizaña también arranquen el trigo; hay que espera hasta cuando llegue la ciega, por eso Dios espera al pecador para que deje de hacer todo tipo de maldad; y permite además que convivan gente buena con gente mala, en este mundo, donde el cristiano tiene que permanecer firme, no dejándose arrastrar por el mal, como muchas veces se dice: como todo el mundo lo hace yo también lo hare.

La cizaña será quemada, al final de los tiempos ya que la cosecha esta pronto, y la ciega comenzara, dice el dueño del campo, que para cosechar primero hay que sacar la cizaña y atadla para echarla al fuego, ojalá que nosotros no seamos esa cizaña.

El bien prevalece, el trigo bueno estará en el granero, pues son los hombres, que son buenos trigos, son aquellos, que han dado frutos en su vida, que acogieron la palabra de Dios, y que no se han dejado ganar por el mundo, el poder y el placer; no se han desanimando frente a la fuerza aparentemente avasalladora del mal, pues el reino de Dios ha vencido a la fuerza del mal.

La parábola del grano de mostaza y levadura, nos indica que no hay que desanimarse, aparentemente es tan pequeña la semilla y un poco de levadura, hacen una gran fuerza, donde empieza avanzar de manera increíble el reino de Dios, que ha comenzado ya, con la presencia de Jesús en este mundo, y que ella se propaga por los buenos cristianos comprometidos, que van transformando esta realidad, no querida por Dios, a una nueva realidad querida por Dios, sabiendo que su reino prevalecerá para siempre.

                                                   Pbro.  Salvador Carrasco C.

viernes, 14 de julio de 2017

XV DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO CICLO A 2017

Posted by salvador on 7/14/2017 02:54:00 p.m. with No comments


¡EL SEMBRADOR ES MUY GENEROSO!

El sembrador es muy generoso con todos, quiere que la semilla, que es la Palabra de Dios, llegue a todos, sin distinción de raza, pueblo, de lenguas… Jesús es el buen sembrador, que rocía la semilla en la tierra, que somos cada uno de nosotros, sin distinción, esperando obtener buenos frutos.

La semilla, es muy buena, cae en distintos terrenos, ese terreno somos cada uno de nosotros. Jesús nos dice que hay tres grupos de personas, que no alcanzan la salud del alma por no acoger la palabra de Dios; y no es porque la semilla sea mala, por eso que rechazan su mensaje  y lo ven como un fracaso; pero hay un cuarto grupo de personas, que acogen la Palabra de Dios, y que el éxito no depende de la semilla, sino porque estas personas están dispuestas acoger en su corazón la semilla y alcanzan la salud del alma.

La semilla que cae en el camino, se refiere aquellos que no acogen la Palabra de Dios, en su corazón, porque rápidamente viene el maligno y la arrebata, son los que odian a Dios, los indiferentes, los tibios, que han cerrado sus ojos, y tapado sus oídos al mensaje de Dios; ven que nada ha cambiado, todo sigue igual, por eso su mensaje no tiene éxito y es un fracaso; por eso no entienden nada del Reino de Dios.

La que cae en terreno pedregosos, son aquellos que acogen la Palabra de Dios con entusiasmo, simpatía y alegría, pero son inconstantes, y ante la tribulación por la misma Palabra sucumben fácilmente, por tener un corazón débil; quieren pasarla bien, no quieren sufrir a causa de la Palabra; la semilla por no tener raíz se secó. Son los cristianos débiles, que no quieren correr el mismo riesgo de Jesús; solo viven de emociones y son muy superficiales.

Otros, que, al caer la semilla, entre espinos, empieza a crecer, pero las malas hierbas que simbolizan las riquezas y los afanes del mundo ahogan la palabra de Dios, dando espació a sus propias riquezas y placeres que el mundo les ofrece. Son los que sirven a Dios y al dinero. Son los cristianos de etiqueta y de fachada, que solo aparecen en las fiestas patronales, o en las misas de difuntos, y después se alejan de Dios, buscando los placeres de la vida y las riquezas.
Finalmente, los que acogen la palabra de Dios en su corazón, con alegría; la semilla cae en buen terreno fértil, que dará frutos muy abundantes, y son aquellos que meditan la Palabra de Dios, la aprenden y la guardan en su corazón; como ejemplo tenemos a nuestra Madre, la Virgen María, que acogió en su corazón la Palabra de Dios, y dio su fruto. Dios quiere que nuestra vida sea un buen terreno fértil, para acoger la Palabra de Dios y de muchos frutos, como los grandes santos. También la Palabra nos compromete para que seamos buenos sembradores, anunciando a Jesús y su mensaje a todas las personas, para que amen a Jesús y vivan conforme a sus enseñanzas. 

                                                  Pbro.  Salvador Carrasco C.


sábado, 8 de julio de 2017

XIV DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO CICLO A 2017

Posted by salvador on 7/08/2017 09:49:00 p.m. with No comments


¡EL MISTERIO DE AMOR, ES REVELADO A LOS PEQUEÑOS…!
Jesús lleno de alegría y jubilo, da gracias a su Padre, porque este misterio de amor, se ha revelado a los pequeños y humildes, que han acogido su mensaje, de la llegada del reino de los cielos, han aceptado su plan y su designio, que Dios tiene sobre los hombres; pero los doctos y entendidos, que eran los escribas y fariseos, conocedores de la Ley, hoy en día sería la élite de toda clase, han desautorizado o rechazado a Jesús y su mensaje sobre el reino de los cielos. No han dado crédito a sus enseñanzas, porque creen que lo tienen todo.

El Hijo de Dios, revela el rostro del Padre a los pequeños y humildes, manifestando su profunda  e intima relación con su Padre, que conoce a su Hijo; y que el Hijo conoce a su Padre, que es Señor de cielo y tierra; además también manifiesta la misión que le ha confiado su Padre, en favor del hombre. Los pequeños y humildes, reconocen al Padre celestial que Jesús les ha revelado. También es el mismo Jesús que nos manifiesta en su persona al Padre al decir:” Quien me ve a mí ve a mi Padre”.

El Hijo no revela los misterios de su reino a los sabios y entendidos, se refiere a los escribas y fariseos, conocedores de la Ley, que han cerrado su corazón al mensaje de Jesús y de su reino, desacreditándolo; no tenían un corazón bien dispuesto para acoger al Mesías y su mensaje; no es que este velado su mensaje, ni tampoco Jesús está contra la sabiduría que logra el ser humano; sino más bien, es el orgullo y la soberbia, de muchos de ellos que se creen autosuficientes, y que no necesitan nada de Dios, porque lo tienen todo. Muchas veces, esto se da en las élites religiosas, culturales, políticas... que quieren someter a toda la gente humilde, y que si no se someten son amenazados, sometiendo sus vidas a unas cargas muy pesados e insoportables. También son aquellos, que se presumen de tales, que piensan que con su mucho conocimiento pueden alcanzar toda la verdad; son los que el mundo considera grandes por razón de su ciencia e inteligencia, que tienen éxito, los que no tolerarían jamás ser pequeños. Es una triste realidad.

                                                  Pbro. Salvador A. Carrasco C.



"APRENDED DE MI QUE SOY MANSO Y
           HUMILDE DE CORAZÓN".

Vengan a mí los que están cansados y agobiados que yo los aliviare, los que están cansados de llevar esta carga impuesta por estos escribas, que obligaban a la gente sencilla, que tenían que cumplir los seiscientos trece preceptos, que ni siquiera estos escribas lo cumplían, por eso lo hacían insoportable; Jesús los invita a llevar su nuevo yugo, que es una carga ligera y liviana, que es cumplir sus enseñanzas, y su vida ejemplar; y a los que están agobiados por los pecados que uno comete y uno es victima de los pecados que otros cometen; Jesús viene a perdonar a todos los que acogen su mensaje, para estar aliviados; por eso Jesús, acoge a los pecadores, para liberarlos del pecado que los oprime, angustia y agobia.

Aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón, el ser manso no es sinónimo de ser sonso, que así entendemos, sino que ser manso significa, que reaccionamos muy lentamente a la persona que nos ha ofendido, sin reaccionar con cólera; Jesús nos da ejemplo de mansedumbre, al decirle al que lo agredió: "¿Porque me golpeas, dime en que te he ofendido?." Con ello nos invita a que no debemos reaccionar con ira y violencia. Nos invita  a ser humildes; Jesús fue el más humilde, lo tratamos como basura de los hombres... y todo lo hizo porque nos amaba tanto, indicando que la humildad es un servicio, en favor de nosotros, cumpliendo la misión que el Padre le había encomendado. Dios no quiere a los soberbios, orgullosos ni vanidosos, que reaccionan con violencia cuando hieren su ego. Que la Virgen María, una criatura tan humilde, no ayuda a cada uno a ejercitar la virtud de la humildad.

                                                      Pbro. Salvador A. Carrasco C.

sábado, 1 de julio de 2017

XIII DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO CICLO A

Posted by salvador on 7/01/2017 09:40:00 a.m. with No comments

¡EXIGENCIAS PARA SEGUIR A JESÚS!

Amar a Dios sobre todo amor humano, Jesús quiere que seamos dignos de él, si realmente lo amamos, más que a nuestros propios padres o a nuestros propios hijos. No nos está pidiendo que dejemos de amar a nuestros padres o a nuestros hijos o a nuestra familia; Jesús no quiere destruir el entramado familiar, sino más bien nos pide que debemos amar a Dios por encima de todo amor humano; y si la familia es un obstáculo para amar a Dios, debemos priorizar el amor a Dios por encima de la familia, donde con dolor se tiene que romper todo lazo o cadena que nos impida amar a Jesús. San Agustín nos da una gran enseñanza, si tu amigo te conduce a Dios, debes amarlo, sino no te conduce a Dios, es porque te está conduciendo a tu propia condenación; esto es también para la familia, especialmente para todos los que ha experimentado el amor de Dios, donde Jesús les ha confiado la misión de anunciar la buena noticia a todo hombre, para que conozcan el amor de dios y alcancen la salvación.

“El que no toma su cruz, no es digno de mi”, la cruz simboliza el dolor, sufrimiento, el rechazo, el desprecio, la perdida de trabajo por ser fiel a Dios, la marginación, la burla de sus amigos, lo tratan de oscurantista, retrogrado… así son tratados por personas que se han apartado de Dios, pero a pesar de ello llevan esta cruz por ser fieles al Señor. No es la cruz por la cruz, sino más bien es la cruz que uno carga con paciencia por amor a Jesús.

“…el que pierda su vida por mí la salvará”, el mundo quiere que malgástenos nuestras vidas, cumpliendo sus doctrinas, que continuamente nos anuncian y nos ofrecen, como son: hay que triunfar en este mundo, tener grandes éxitos; ser inteligentes para prosperar en el negocio, adulterando el producto; ser un gran millonario; tener fama y ser un gran ídolo, para que mucha gente lo adore al llenarse los estadios o coliseos; podemos decir: "Que todo vale, para tener éxito y triunfar en esta vida". Jesús realmente nos pide que desgastemos nuestra vida por amor a Él; que siempre nos pongamos en camino con nuestros hermanos de fe, para que anunciemos a Jesús, que anunciemos el evangelio de manera clara e integra al mundo, para que el pecador se convierta y cambie de vida, eso hacen los que realmente aman a Dios incluso hasta perder su vida por amor a Dios.

Quien me recibe a mí, recibe a mi Padre, y nadie quedará sin recompensa, cuando se recibe a un apóstol, se recibe a Jesús; es decir, si un miembro de la familia acoge a un siervo de Dios en su hogar, como la Sunamita que acogió a Elíseo, entonces está acogiendo el mensaje de Jesús, y esta familia recibirá la bendición de Dios, y también recibirá su recompensa. Jesús nos dice si se acoge a un profeta, o a un justo, se tendrá la recompensa de un profeta, o de un justo; incluso cuando se dé a beber agua a uno de estos pequeños, tendrá una gran recompensa.



                                 
                               Pbro.  Salvador Carrasco C.