domingo, 7 de junio de 2015

CORPUS CHRISTI CICLO B 2015

Posted by salvador on 6/07/2015 05:36:00 p.m. with No comments




CORPUS CHRISTI”: ¡SIGNO DE LA NUEVA ALIANZA!



Hoy celebramos la fiesta del “Corpus Christi” que es el misterio  de nuestra fe, donde Cristo Jesús nos ha dejado este gran regalo, que Santo Tomas lo llama: “El dulce mangar del cielo” y es el signo de la nueva alianza.

Dios toma la iniciativa, conduce a su pueblo liberado al desierto y lo lleva a la montaña para concluir su pacto. Moisés, el mediador, hace lectura ante el pueblo de la Ley (los mandamientos) que son el contenido de la alianza que el Señor establece con su pueblo. El pueblo, por su parte, se compromete a observar todo aquello que le manda el Señor, realizando el rito del sacrificio, sea de holocausto o de comunión, para sellar con la sangre del animal sacrificado la alianza.

 Esta alianza del Sinaí encuentra su culminación y perfección en la nueva alianza que Dios establece con los hombres por medio de su Hijo Jesucristo. La alianza ha llegado a su máxima expresión. Ya no es la sangre de animales la que ofrece el sacerdote en el «santo de los santos», ahora es la sangre misma de Cristo, sumo sacerdote, la que se ofrece. Jesús, el Verbo Encarnado, habiendo muerto y resucitado ha entrado de una vez para siempre en el santuario del cielo y está a la derecha del Padre intercediendo por nosotros, sus hermanos en adopción.

 Con la sangre de Cristo se establece la nueva y definitiva alianza. En su sangre, es el don de su vida, que manifiesta el amor del Padre por el mundo: «Porque tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo único,  para que todo el que crea en él no perezca, sino que tenga vida eterna» (Jn 3,16).

La Hostia santa se convierte en «trigo que nutre nuestras almas». Hoy la Iglesia nos invita a celebrar lo que Cristo ha querido perpetuar, su presencia en la Iglesia a través de la Eucaristía, sacramento y signo de la Nueva Alianza, y de la cual nace, surge y se encamina la Iglesia de Cristo, este es el sacramento que crea la comunión y la unidad en la Iglesia; no sólo entre sus miembros, sino en cuanto a los miembros con su cabeza.

                                               Pbro.  Salvador Carrasco Castro                                  


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