V DOMINGO DE PASCUA CICLO B 2018

"EL QUE PERMANECE EN MÍ, DA MUCHO FRUTO"

La viña de Israel, esta viña que nos hablan los profetas, así nos dice: Jeremías: “Israel te plante como vid escogida” … En esta línea nos hablan también los profetas Ezequiel y Ósea: “Israel es una frondosa viña”. Pero no dieron lo que se esperaba…

“Yo soy la verdadera vid”, acá Jesús afirma claramente una gran sustitución. La vid no es ya el pueblo judío, sino Jesús mismo. Ahora es Jesús la verdadera vid, y su Padre es el labrador; y tenemos que permanecer en él, para tener esa savia que es el Espíritu Santo, para dar abundantes frutos.

El que permanece en mí, ese da muchos frutos, los sarmientos, son todos los discípulos que se unen a Cristo, al recibir el bautismo; nos unimos íntimamente con Cristo, somos sarmientos de la vid verdadera, ya no de Israel, donde él permanece en nosotros y nosotros permanecemos vitalmente en él; y permanecemos en él por la oración, frecuentando los sacramentos, realizando obras de caridad, amándonos los unos a los otros, como él nos ha amado. Hemos sido limpiados por su Palabra y su obra.

Mi Padre poda los sarmientos, para que den muchos frutos, al podar las ramas, significa que se está sacando aquello que impide que puedan dar buenos frutos;  la poda es dolorosa para todo creyente, es decir para nuestra vida, que corta de nosotros lo malo que hay, o aquello que nos impide estar más íntimamente unidos a Cristo para nuestro bien y así asemejarnos en todo Cristo para que demos frutos de verdad.

También mí Padre arranca los sarmientos que no dan fruto, son aquellos que no están íntimamente unidos con Cristo, ni permanecen en él, dice Jesús: “Sin mi nada pueden hacer”; son cristianos de palabras, de costumbres, ritualistas, legalistas, y con poca fe, pues no dan frutos, por su orgullo y autosuficiencia… Son aquellos que dicen ser discípulos, pero les gusta vivir en pecado, les gusta vivir alejados de Dios, haciendo de su vida un desenfreno a todo lo que el mundo les ofrece. Estos están destinados al fuego eterno, porque no dan frutos, no hacen buenas obras.

Dios también nos poda a nosotros, siempre nos preguntamos en relación al sufrimiento, ya que el podarnos, la persona sufre, y es el camino que Dios quiere, para que realmente demos frutos de verdad, como paso con los grandes personajes del Antiguo testamento: Abrahán,… y del Nuevo Testamento, Jesús sufrió mucho por nosotros, la Virgen María,…Donde glorificamos a nuestro Padre celestial, cuando realmente realizamos obras de caridad y no de  palabras.

Pbro. Salvador A. Carrasco Castro

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IV DOMINGO DE PASCUA CICLO B 2018

BUEN PASTOR

¡YO DOY MI VIDA POR LAS OVEJAS!

“Yo soy el Buen Pastor”, es una imagen sacada de la realidad pastoril del pueblo de Israel, que expresa la profunda preocupación de Jesús, por cada uno de nosotros. Jesús es buen Pastor porque es guía del rebaño, conduciendo a su reino de vida, sacándolas de las tinieblas; es buen Pastor porque está cerca de las ovejas, que han sido descartadas, que no tienen remedio (gente que parece que no tienen solución, pecadores, enfermos incurables, pobres...), essta con ellas, curando a las heridas, sanado a las enfermas, alimentando a las hambrientas, misericordioso con los pecadores; para Jesús el buen Pastor nada está perdido. Es buen Pastor, porque va detrás del rebaño, no quiere que ninguna quede rezagada o este perdido, quiere que todos ingresen al paraíso. También es buen Pastor, porque nos da el mejor alimento, que es su cuerpo y sangre; nos deja también como alimento su palabra. Jesús, es Buen Pastor, porque no se deja condicionar por ninguna autoridad de su tiempo., ni con los poderes religiosos o políticos..., que existían en su tiempo. Los asalariados o falsos pastores se acercan al dinero viendo que han dejado, y negocian para obtener un poder y no perderlo, que es una triste realidad.

Los mercenarios, o asalariados, son los que se aprovechan de las ovejas, las engañan, las explotan, las maltratan, las amenaza, las juzgan, las exprimen, incluso las matan; usan todos los medios de comunicación para manipularlas. No se acercan, ni las curan, están lejos de ellas, juzgándolas.  Esto es muy penoso, que a la luz de la palabra de Dios, estos grupos de poder no se interesan por nosotros, más bien sacan provecho y beneficios y los dejan muy endeudados, y con problemas. Pidamos a Dios por los pastores, para que no busquen sus propios intereses económicos y los ayude para que puedan tocar a las ovejas que necesitan ser sanadas...nos pide el Papa Francisco, que debemos estar acompañando a las ovejas, y tener olor de ovejas, atendiendo a todas si es posible. Pero también hay otros pastores malos, que permanecen indiferentes, ante las injusticias, de robo, muerte y engaño,  no hacen nada por el bien de la niñez, de la familia de la juventud, de la ancianidad, y estos se están manteniendo en el poder, y permitiendo estos abusos.

“Yo conozco a las mías y las mías me conocen a mí, es una bonita expresión, que debe alegrarnos a todos nosotros, porque cada uno es muy importante para Jesús; él nos llama a cada uno por su nombre, nos conoce personalmente, sabe de nuestros problemas, aflicciones… conoce también nuestra manera de pensar, conoce cuales son nuestros deseos, cuáles son nuestras debilidades; es decir nos conoce muy bien. Como él conoce al Padre y el Padre lo conoce a él, en ese mismo modo nos conoce a nosotros y nosotros a él, es una relación muy íntima con Jesús.

“Yo doy mi vida por las mías”, la gran novedad del buen pastor, es que da la vida por sus ovejas, para que ninguno muera, y lo hace todo porque realmente nos ama, en nuestro propio lenguaje: Jesús se desvive por cada uno de nosotros, es decir, se preocupa profundamente por nosotros. Mientras el asalariado huye al ver al lobo, no da su vida por las ovejas, porque no es el dueño, solamente quiere salvarse a sí mismo, y abandona a las ovejas en cuanto ve venir al lobo, por eso las ovejas se dispersan.

Debemos saber elegir a los verdaderos pastores, porque son los indicados, para alimentarnos con la verdadera interpretación de la Palabra de Dios, nos alimentan con su sana doctrina, nos dan la gracia por medio de los sacramentos. Que no nos sorprendan los falsos pastores, que están abundando y aparecen en cada cuadra de nuestra ciudad, confundiendo a la gente con sus falsas doctrinas, juzgando, sentenciando a los verdaderos pastores, condenándolos y así confunden a la gente para que los sigan.

Habrá un solo rebaño y un solo Pastor, hay otras ovejas y otros pastores, Jesús sabe que hay ovejas en otro rebaño, que Jesús las va a liberar, para que formen un solo rebaño y un solo Pastor.

                     Pbro.  Salvador Carrasco C.

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III DOMINGO DE PASCUA CICLO B 2018

"SOY YO MISMO"

¡JESÚS, ESTÁ VIVO!

Los discípulos contaban su experiencia con Jesús resucitado, dos discípulos reunidos con los apóstoles, contaban que lo reconocieron a Jesús, en la fracción del pan; de igual maneras los apóstoles sabían que se había aparecido a Pedro, es una nueva forma de reconocer a Jesús, especialmente los que estuvieron con él. También nosotros podemos reconocer a Jesús a través de su Palabra y del banquete eucarístico.

Jesús esta vivo, les dice: "Soy yo mismo",  les mostró las heridas de sus manos y de sus pies, mirad soy yo mismo, y se llenaron de alegría.  Jesús ha pasado a una nueva manera de vivir, y apareciéndose en medio de ellos, les da el saludo de paz, pues estaban llenos de miedo, asustados, sorprendidos y con dudas por la presencia sorpresiva de Jesús, piensan que es un fantasma o espíritu.  Un fantasma, no tiene carne ni huesos; a ellos les costaba creer en el Señor, porque para todo ser racional, la muerte es el enemigo de todo ser viviente, y hay miedo; ante ella desfilan los niños, los jóvenes…; y por tanto ella se alza triunfante y victoriosa, ese miedo les va quitando. El resucitado les mostró las heridas de sus manos y pies, les dijo: “Soy Yo mismo”, y para disipar sus temores, les permitió tpalpar sus heridas y al momento se llenaron de alegría y asombro, pues no acababan todavía de creer lo que estávan  viendo y tocando; además les pide si tienen algo para comer, y le alcanzan pescado; él lo tomo y comió delante de ellos, pues para su propio asombro, era realmente Jesús, que verdaderamente esta vivo.

Jesús, el resucitado les abrió el entendimiento, les va explicando que en las Sagradas Escrituras, se hablaba ya de él que estaba escrito, en ley de Moises, los profetas, y los salmos, que tenía que padecer, morir y resucitar al tercer día, poco a poco fueron comprendiendo lo que se decia de él.

Hay una nueva experiencia, con Jesús que está vivo, con él todo se hace todo nuevo, empieza una nueva era, en la vida del hombre, él va explicando a los apóstoles, y ahora los prepara para enviarlos, para que se predicará en su nombre, la conversión y el perdón de los pecados a todos los pueblos, empezadno por Jerusalen, hasta los confines del mundo.

Nosotros debemos ser testigos de su resurrección, que Jesús está vivo, que, habiendo despapado nuestras dudas y temores, creamos lo que nos anunciaron los primeros testigos de la resurrección, que en su nombre se predicará la conversión y el perdón de los pecados. Se llenan de alegría y gozo, creen en Jesús que está vivo, seamos evangelizadores, anunciadores de esta gran noticia, que en verdad es el mismo Jesús terrenal que ha resucitado.

                                                                                 

                                  Pbro. Salvador Carrasco C.

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II DOMINGO DE PASCUA - DIVINA MISERICORDIA

¡JESÚS, HA VENCIDO AL MUNDO, NO TENGAN MIEDO!

Los apóstoles estaban llenos de miedo, a pesar de que recibieron el mensaje de María Magdalena, seguían con miedo, por eso las puertas estaban bien cerradas, por temor a los judíos, ya que los judíos odiaban a Jesús también odian a sus seguidores, los insultan y maltratan.

Jesús con su Resurrección ha vencido al mundo, se apareció a los apóstoles y les dice: “Paz a ustedes”, les mostró al momento las heridas de sus manos, de sus pies y del costado; ellos, habían visto y tocado, por eso se llenaron de alegría y gozo. Ahora estarán sin miedo en este mundo, como lo estuvo Cristo. Jesús quiere que estemos en este mundo como lo estuvo Jesús, que venció, es un reto para todos los cristianos, no tener miedo al mundo, aunque resulte muy hostil para nosotros, pues sabemos que Jesús ha vencido al mundo y tenemos que vencer al mundo llevando el mensaje de salvación.

Reciben el poder de perdonar los pecados, Jesús soplo sobre ellos y les dijo “Reciban el Espíritu Santo; a quienes perdonen los pecados les serán perdonados ya quienes se los retengan les quedan retenidos”. En ese momento, Jesús les hace participes de su propia vida, de su misión y de su poder, los ha capacitado, para vivir como Jesús ha vivido en este mundo cumpliendo su misión, y llevando la gran noticia. En este momento se instituye el Sacramento de la Confesión, y es el lugar donde todo penitente experimenta la Misericordia de Dios.

                        Pbro. Salvador A. Carrasco Castro

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