sábado, 18 de enero de 2020

II DOMINGO DE TIEMO ORDINARIO CICLO A 2020

Posted by salvador on 1/18/2020 09:58:00 p.m. with No comments


JESÚS ES EL CORDERO DE DIOS, QUE QUITA EL PECADO DEL MUNDO

Juan nos anuncia, que Jesús es el “Cordero de Dios que quita el pecado del mundo”. Los judíos no conocían quien era Jesús, pero él dice que detrás de mí, viene alguien que es más grande que él. Al día siguiente, Juan vio a Jesús que se acercaba y exclamó: “Este es el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo”.   

Jesús como “Cordero de Dios”, significa que será la nueva víctima. El Cordero, sin mancha, sin defecto, que cargará sobre si, el pecado de la humanidad, no gritará, no voceará, manso y humilde, que será llevado al matadero, recordando el Misterio Pascual. Nadie es dueño de este Cordero, es el Padre que elige a su Hijo, lo ofrece como víctima, como el verdadero Cordero de Dios, que carga el pecado del mundo, será signo de la acción salvadora, salvando a toda la humanidad.

Jesús: Es el Hijo de Dios, lleno del Espíritu Santo” que lo capacita para que cumpla la misión encomendada, de quitar el pecado del mundo. Juan al principio no lo conocía, pero cuando se posa la paloma sobre Jesús, recién lo conoció... y puede ahora dar testimonio diciendo: “Él es el Hijo de Dios”, que quita, el pecado del mundo. Nadie quiere expresarse sobre el pecado, que nos afecta a todos, incluso en nuestros días, perdiéndose la conciencia de pecado, como nos decía el Papa Pio XII.

Juan Bautista, con su humildad, nos dice que hay otro mayor que él, que los bautizará con Espíritu Santo, es la acción poderosa del Espíritu Santo, que nos purifica de todo pecado y hay un nuevo renacer, un nuevo nacimiento, que empieza con la muerte redentora de Cristo Jesús, que muere como Cordero en la Cruz. No ha venido a condenar, sino a salvar al hombre. A partir de ahora tenemos que dar testimonio de nuestra vida que vivimos un continuo proceso de conversión, que, al recibir la gracia bautismal, nos hace hijos de Dios, coherederos en Cristo Jesús, somos ya distintos, porque el Señor ha trasformado nuestra vida.


Pbro. Salvador A. Carrasco Castro

sábado, 11 de enero de 2020

BAUTISMO DE JESÚS CICLO A 2020

Posted by salvador on 1/11/2020 09:43:00 p.m. with No comments

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 “ESTE ES MI HIJO, EL AMADO, EN QUIEN ME COMPLAZCO”

En tiempos de Juan Bautista, Jesús quiere que se le bautice. Grandes masas populares acudían de todas las regiones de Palestina para escuchar su predicación y recibir de  su mano el bautismo de conversión. Jesús, está en medio de esa multitud de gente, que se mezcla entre publicanos y mujeres perdidas, esperando su turno, que sentían la necesidad de perdón y de cambio de vida; el bautismo de Juan; es el bautismo de conversión. Jesús no siendo pecador, se hace pecado, para asumir toda nuestra condición humana, haciéndose igual en todo a nosotros menos en el pecado. Juan intentaba impedir dicho bautismo y le dijo a Jesús:

“Soy yo el que necesito que tú me bautices, ¿y tú acudes a mí? Jesús no tenía pecado, ni podía tenerlo, Esta actitud de Jesús marca la tónica de toda su existencia. Jesús pide ser bautizado, para que se cumpliera todo lo ordenado por su Padre, y así se pudiera cumplir por justicia. Nosotros también somos necesitados de Dios, por eso gracias a Jesús, también nosotros hemos sido bautizados, para que se nos perdone todos los pecados, y ser hijos de Dios, con todo derecho como nos dice san Juan. Y ahora se lo mas grande y sorprendente:

“Tú eres mi Hijo, el amado, en quien me complazco”, apenas se bautizó Jesús, salió del agua y se abre el cielo, y vio que el Espíritu Santo descendió como paloma, y se posaba sobre él. Y vino una voz potente del cielo que decía: “Este es mi Hijo, el amado, en quien me complazco” En ese momento se manifiesta el rostro divino de Dios en su humanidad a favor del hombre, que viene a salvarlo, al asumir su condición de hacerse pecado por nosotros.

Todo bautizado adquiere una gran dignidad de ser hijo de Dios, de ser heredero; desde el momento que ha sido bautizado, empieza una vida nueva en Cristo Jesús, pues también somos ungidos o marcados por el Espíritu Santo, formando la gran familia. Somos templos del Espíritu Santo; es el mismo Espíritu de Dios, que ha grabado en nuestros corazones la ley de Dios, para hacer siempre a voluntad de Dios, el bautismo nos hace participar de la vida divina de Jesús; y de su misión:

Finalmente, querido hermano y hermana, ama a esta Santa madre Iglesia, que sufre, pues a través del sacramento del bautismo, que Jesús le ha confiado, has nacido a una nueva vida en Cristo, para que puedas decir como San Pablo, “Yo ya no vivo, es Cristo Jesús que vive en mí”
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                                               Pbro. Salvador A. Carrasco Castro


sábado, 4 de enero de 2020

LA EPIFANIA DEL SEÑOR CICLO A 2020

Posted by salvador on 1/04/2020 07:17:00 p.m. with No comments
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LOS MAGOS SE PONEN EN CAMINO, PARA ADORAR AL REY .

Hoy celebramos la Epifanía del Señor, que es la manifestación de Dios a todas las naciones, y se expresa por un gran signo que es la estrella, que guía a los reyes magos. El niño Rey, nació en una aldea de Belén, estaba con los suyos, dando así, cumplimiento a la promesa, que tendría que nacer de la estirpe de David, pero no solo se manifestó al pueblo de Israel, sino a toda la humanidad.

Los magos buscan, y se ponen en camino, para encontrar al Rey que ha nacido, para adorarlo, los tres reyes magos representan a todas las naciones paganas, que guiados por la fe, expresada por la estrella; buscan como los pastores, y se ponen en camino, pues no tienen itinerario, que para buscar al niño Dios, son guiados por la estrella de la fe, dejan sus tronos, sus tierras y empiezan su peregrinación, porque desean descubrir al salvador del mundo que se ha manifestado no solo al pueblo de Israel sino a todas las naciones, que quieren adorarle y ofrecerle algunos regalos al niño Rey, como a un Dios. Llegando a Jerusalén estaban perdidos, por eso preguntan al rey Herodes: “¿Dónde está el Rey de los judíos que ha nacido? Porque hemos visto salir su estrella y venimos a adorarlo”.

Los suyos no lo reconocieron, los sumos pontífices y los escribas estaban desinteresados, del nacimiento del niño Dios. El rey Herodes, un hombre usurpador del trono real, ayudado por los romanos, se estremece él y todo el pueblo, ante el nacimiento del Rey de los Judíos; teme ser destronado; por eso convocó a los sumos pontífices y los letrados, preguntando donde tenía que nacer, le respondieron en Belén. Ahora el rey Herodes les dice a los magos que vayan a Belén para adorar al Mesías, y con mentiras, les dice a los reyes magos que, al regresar, avísenme para que también vaya adorar al Mesías, pero su intención era otra, la de matar al Mesías; y fue burlado, por los reyes magos que fueron por otro sitio, gracias al ángel que se les apareció en sueños, que les dijo que vayan por otro camino.. Encontramos tres tipos de personas ante el nacimiento de Cristo, unos que son la gente sencilla, como los pastores y reyes magos que dejan todo por adorar al niño Dios; otros, que son como los sumos pontífices y escribas, que saben sobre su nacimiento conforme a los libros sagrados, pero no les interesa nada, no van adorar al niño Dios, se preocupan por si mismos; y finalmente, los que tienen poder, como el Sumo Sacerdote, el rey Herodes, y otros, que al tener un cargo importantes se estremecen ante nacimiento del Mesías y usan todo su poder para matar y destruir.

Que la fiesta de hoy sea ocasión para aceptar que Jesús no solamente vino por mí, sino por toda la humanidad y de todos los tiempos para salvar al hombre de manera integral, y sacarlo de las tinieblas, para que empiece a vivir bajo la luz de Cristo; por eso nuestra mayor preocupación es ponernos en camino como los reyes magos, para encontrarse con el Rey del Universo que ha nacido, y retornemos alegres a nuestros hogares, como lo hicieron los reyes magos, que tuvieron un encuentro con Dios, dejando sus regalos, y se marcharon a su tierra transformados y alegres.

                               Pbro. Salvador Carrasco Castro