¡LA SAGRADA FAMILIA!
Hoy es la fiesta
de la Sagrada familia, nos invita a introducirnos en
la vida íntima de esta comunidad de amor, conformada por María, José el padre y
el niño Jesús. El nuevo hogar da un calor humano y afectivo al niño Jesús, que
va creciendo y desarrollándose en un ambiente de paz y de buenas relaciones que
existe entre los esposos y los padres con el niño Dios, que santifica esta
realidad tan humana como toda familia.
Son una familia
piadosa y cumplidora de la Ley, como estaba
escrito en el libro de la Ley, tres veces al año tenían que ir los varones a
Jerusalén a celebrar las tres fiestas Judías, que son: la Pascua Judía, Pentecostés
y la de los Tabernáculos. José y María,
se dirigían a Jerusalén, con el niño Jesús que ya había cumplido los doce años,
para celebrar las fiestas de la Pascua; María no tenía la obligación de ir,
pero iba porque amaba a Dios y eso le movía. Cuando el niño Jesús tuvo doce
años, tenía el anhelo de estar en la casa de su Padre, y en atender las cosas
divinas de su Padre. Dios quiera que haya muchos padres de familias que siempre
sean piadosos, justos y cumplidores de la ley, acompañando a sus hijos al
templo y consagrándolos y presentándoles continuamente al Señor, y no dejen
sueltos estos niños por el mundo, que muchas veces se consagran a otros ídolos,
y se pierden por culpa de sus padres, que no supieron acompañarlos.
María y José
buscan a Jesús, no quieren perderlo, y Jesús busca a su Padre; María y José se preocupan por su hijo, que no está en la caravana, están angustiados,
deciden a regresar a Jerusalén, lo buscan al niño y lo encuentran en el templo enseñando
a los doctores de la Ley, les enseñaba con sabiduría. También hay angustia
cuando perdemos a Dios en nuestra vida, y tenemos que buscarlo, es necesario regresar como regrresarón María y José a Jerusalen; tambien nosotros tenemos que volver o regresar para encontrarnos con Jesús y habite en nuestros corazónes. María dijo a Jesús, ¿José, tu padre y
yo, te hemos buscado? Jesús no quiere reprochar a su madre están pues todo ello
encierra un gran misterio; y le dice la verdad:
“No sabían que yo
debería estar en la casa de mi Padre”, los padres
angustiados, con tensión y dolor han buscado a su hijo, que les responde que
debo estar en la casa de mi Padre; al tercer día lo han encontrado; haciendo referencia,
que también al tercer día resucitará, y se aparecerá a los suyos; he venido
hacer la voluntad de mi Padre, con ello está mostrando su origen divino; María
no comprendía todo ello, pero guardaba estas cosas en su corazón. Jesús se
comportaba como un niño normal de de su tiempo, había ángeles, ni coros
angelicales, como lo hubo en su nacimiento; por eso van conociendo su origen
humano.
Pbro. Salvador Carrasco
Castro
