¡EL AMOR A DIOS Y AL PRÓJIMO DA PLENITUD A LA LEY!
No he venido abolir la ley
ni a los profetas, sino a dar plenitud, Jesús
es la Ley… Él es el nuevo legislador, que da plenitud a la Ley dada por Moisés.
Cumplir la ley en plenitud significa para todo cristiano, que no solo la cumple
exteriormente, sino también interiormente y de corazón.
Si no soy mejores que los
letrados y los fariseos no entrareis al
reino de los cielos, lo que Jesús nos
quiere decir, es que debemos cumplir la ley por amor y no por temor, que se
expresa en el amor a Dios y a nuestros hermanos, incluso amando a nuestros
enemigos, dando la vida por nuestros enemigos; Jesús murió en la cruz, por amor a todos
nosotros, perdonando desde la cruz a sus enemigos; pues, los escribas y fariseo solo cumplían la
ley de manera egoísta e interesada.
Han oído que se dijo…
pero yo les digo, no es una antítesis, más bien es una
complementación de la Ley, para vivir la
nueva alianza. Así tenemos el caso de “no mataras”, agrega el insulto, la ira,
la agresión, el desprecio, el resentimiento contra alguien, también eso mata al
prójimo. Si sabemos perdonar, buscando la reconciliación con el ofendido. Sobre
“no cometerás adulterio”, no solamente se refiere al hecho físico sino al deseo
de corazón, que comete adulterio en su corazón… y el que repudie a su mujer,
pues la deja en un plano inferior al hombre en relación con la ley, y la
relación debe ser regulada por el amor, finalmente, “no jurar en falso”, pues
se refiere que cuando tenemos que
decir si debemos decir “si” y cuando tengamos que decir “no”, debemos decir,
“no”, pues no debe haber mentira, en nuestras expresiones ni usar el nombre de
Dios para jurar, ya que Dios está presente en todo.
Pbro. Salvador A. Carrasco Castro
Gracias a Dios, porque nos permite estar con Él, nos permite conocerle y amarle,
cumpliendo los mandamientos de la Ley de Dios de manera más radical. Y también
por que nos da la oportunidad de que lo conozcan a Él a través de estos medios,
para que sea conocido, amado, anunciado y teniendo una rica experiencia de estar
con el Señor, como lo tuvieron los apóstoles y los grandes santos, de todos los
tiempos.
por que nos da la oportunidad de que lo conozcan a Él a través de estos medios,
para que sea conocido, amado, anunciado y teniendo una rica experiencia de estar
con el Señor, como lo tuvieron los apóstoles y los grandes santos, de todos los
tiempos.